A dónde van cuando desaparecen como engullidos por un agujero de gusano.
Existirá en este mundo o quizá en alguno paralelo un lugar que los reciba con los brazos abiertos, un paraíso del que ningún mortal tiene conocimiento.
Qué ocurre cuando los pierdes de vista en un parpadeo, un día están juntos como la leche y el chocolate, y al otro uno queda tan solo e inservible como una caja del zodiaco sin fósforos.
A dónde van Robert, tal vez al lugar donde se escribió la historia de la esfinge y el destino de los mayas.
Maldita sea, cómo puede existir un lugar tan inaccesible, tan lejano, tan perdido.
Enciendo otro cigarro, levanto la vista y miro las estrellas, a Venus, a ese cosmos que se burla de mí, y lanzo una pregunta cargada de desesperanza…
-¿A dónde van los calcetines perdidos?
Hijin.
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